jueves, 16 de mayo de 2019

ACTIVIDADES CUENTO ADIVINA CUÁNTO TE QUIERO


TALLER ADIVINA CUANTO TE QUIERO
Ayuda al conejo a llegar hasta el corazón de corazones
























¿Que otras adivinanzas conoces tu acerca de este animal?















Los dos conejos.

Por entre unas matas,
seguido de perros
-no diré corría-
volaba un conejo.
De su madriguera
salió un compañero,
y le dijo: «Tente,
amigo, ¿qué es esto?»
«¿Qué ha de ser? -responde-;
sin aliento llego...
Dos pícaros galgos
me vienen siguiendo».
«Sí -replica el otro-,
por allí los veo...
Pero no son galgos».
«¿Pues qué son?» «Podencos».
«¿Qué? ¿Podencos dices?
Sí, como mi abuelo.
Galgos y muy galgos;
bien vistos los tengo».
«Son podencos, vaya,
que no entiendes de eso».
«Son galgos, te digo».
«Digo que podencos».
En esta disputa
llegando los perros,
pillan descuidados
a mis dos conejos.
Los que por cuestiones
de poco momento
dejan lo que importa,
llévense este ejemplo.

¿Cuál piensas que es la moraleja de esta fábula?


Consulto algunas características que diferencian a los conejos de las liebres.


¿De qué color eran las liebres del cuento?
¿Piensas Tú que los sentimientos se pueden medir?
¿En qué tiempo se produce el dialogo de los personajes?
Mañana______
Tarde______
Noche______
Explica tu respuesta.
¿Qué trataba con cada afirmación de demostrar la liebre grande?
¿Qué le impedía a la liebre pequeña seguir pensando?
¿De qué manera se despidió la liebre grande de la liebre pequeña?

Realizo un listado de las personas que más quiero.
FAMILIA:
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COLEGIO
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OTROS GRUPOS(CUALES)
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Decir “TE QUIERO” es una tarea a practicar diariamente, de padres a hijos y de hijos a padres, con los abuelos, los tíos y buenos amigos. Pero hay además un lazo íntimo entre padres e hijos que se basa en el amor, demostrarles que les queremos les ofrece seguridad, les da calor y tranquilidad. Transmitimos emociones a través de las nuestras hacia ellos. Nos observan, preguntan y quieren experimentar con nosotros. Expresar en voz alta lo que sentimos por ellos, refuerza esos lazos y este libro nos permite contarlo sin miedo ni vergüenza. Te quiero porque sí y te lo digo porque es cierto y me apetece. Seamos espontáneos con los niños.

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